El parque de Maria Regordosa se encuentra en el barrio de Els Quatre Cantons, en el sector de la villa de Ripollet situado en la orilla derecha del río Ripoll. Es un parque que ya existía previamente y que presentaba algunas deficiencias: exceso de vegetación, falta de acera perimetral en la calle de Tarragona, mala comunicación entre el parque, su entorno urbano y el Centro de Asistencia Primaria (CAP), y pavimentos, alumbrado y mobiliario inadecuados.
El parque se encuentra en la rasante de los edificios que le hacen fachada en el costal norte, que es una rasante inferior a la de las calles perimetrales situadas a los lados sur, oeste y este. La transición entre el espacio central del parque y las calles perimetrales era a través de taludes con una pendiente bastante fuerte. El parque, con relación a su alrededor, estaba realmente hundido.
La intervención ha buscado abrir el parque como espacio hacia el contexto que le rodea creando así una nueva percepción de este espacio. Se ha disminuido el desnivel entre el parque y la calle de Tarragona haciendo un cuidadoso trabajo de topografía. Se ha subido la rasante de la base del talud para que forme un plano con una pendiente del 1'1,5% transversal en el pavimento de sablón; de esta forma se han suavizado los taludes perimetrales y el padre ha dejado de estar hundido.
Con la obra se han mejorado los espacios perimetrales peatonales mediante nuevas y amplias aceras con arbolado, tanto en la calle de Tarragona y la carretera de Terrassa como en la calle de la Virgen de Montserrat. Se han mejorado los diferentes accesos al parque, situados en las esquinas, la mayoría de los cuales ahora son adaptados con rampas, así como la comunicación entre la ciudad y el CAP a través del padre, mediante un sistema de escalera y de rampa integradas en los nuevos taludes con césped, y un paso de peatones adaptado y con semáforos. Se ha mantenido también el paso inferior existente bajo la calle de Tarragona, que une este parque con el que está situado junto al CAP.
Se ha solucionado el exceso de vegetación eliminando la que estaba en mal estado. Se ha realizado una nueva y variada plantación de árboles para conseguir una floración del padre en diferentes épocas del año. Chopos, tilos y mimosas en los taludes y tipuanas en la gravilla, y plátanos de alineación en las aceras perimetrales. Se han plantado los taludes con césped y verbena (Verbena repens) de diferentes colores (rojo, azul, rosa, lila), y también se han incorporado unas manchas circulares de verbena en el espacio central de tierra para calificar este espacio y enriquecer la variedad de vegetación con flor del nuevo parque.
Se ha renovado la iluminación del parque y de los viales. Se ha sustituido el viejo mobiliario urbano por uno de mayor calidad y se han colocado nuevos juegos infantiles en un recinto circular rodeado por una valla de madera. También se ha construido una nueva red de alcantarillado para el parque.