En un solar de 5 m. de fachada a la calle Anselm Clavé (antigua carretera de Barcelona a Vic) y 12,80 m. a la calle de la Esperanza (de 6 m. de anchura) estaba situada una tienda de dos plantas dedicada a la venta de confecciones y prendas de género de puntos para hombres, mujeres, niños y niñas. Es uno de los lugares más céntricos y comerciales de Granollers, a escasos metros de la plaza del Ayuntamiento, cuya "Porxada" barroca ha sido el núcleo del mercado semanal comarcal. Era necesario construir un nuevo edificio sin que se dejara de vender y atender al público. Este hecho explica la lentitud de las obras que exigieron apeos cuidadosos, excavación de una planta de sótanos, substitución de los techos existentes, cerramientos de vanos... todo ello interfiriéndose al uso del viejo edificio y de las zonas que parcialmente iban construyéndose. El edificio es un contenedor único, ciego, que sólo se abre al exterior por la planta que está en contacto con el suelo a través de los escaparates. El edificio iba a ser destinado, en su totalidad, a la venta y era necesario encontrar una solución de continuidad interior sin perder espacios. La exigüidad del solar no lo permitía. A sí cada planta está subdividida en dos niveles distintos: uno de unos 2/3 de la superficie, 80 cm. más bajo que el resto, separados de un graderío de la máxima amplitud. El segundo nivel enlaza con el nivel bajo de la planta superior mediante un tramo de escalera, apenas sin barandilla, abierta a los espacios inmediatos inferiores. Esta sucesión de espacios pequeños y grandes, a niveles distintos, unidos alternativamente por graderíos y tramos lineales de escalera permite una continua relación de zonas, solamente posible en un esquema de envolvente única. La comunicación vertical con intención de servicio está asegurada, además, por un ascensor contiguo a los tramos lineales de escalera abierto siempre a la subzona alta. La piel exterior del edificio es una envolvente de plancha metálica acanalada, en gris muy oscuro, con unos signos luminosos que de noche publican la presencia del comercio y una escalera de caracol exterior para posibles emergencias. Esta escalera, además, singulariza el edificio a la vez que da una referencia a su auténtica escala interior. La cubierta, un techo plano, establece la comunicación entre el interior del edificio y la escalera de emergencias y alberga los climatizadores del sistema de calefacción, refrigeración y ventilación del edificio.
