El edificio conocido como Casa Viuda Marfà es un edificio de estilo historicista que combina elementos procedentes de la tradición constructiva románica y gótica. Localizado en el chaflán que conforma el Paseo de Gracia con la calle Valencia, fue proyectado por el arquitecto Manuel Comas i Thos en 1901 y terminado en 1905.

Se trata de un edificio -en origen residencial- con cinco niveles de alzado (planta baja, principal y tres pisos más), construido aprovechando el chaflán creado por el Paseo de Gracia y la calle Valencia, con cubierta a dos vertientes que se combina con una azotea plana transitable. Es precisamente el chaflán el que condiciona el acceso al interior del edificio, la distribución de los espacios en planta y espacialmente el tipo de fachada.

La fachada se desarrolla en tres cerraduras de desigual anchura y tratamiento decorativo a consecuencia del chaflán. El tramo central (el chaflán propiamente dicho) es el más significativo, enmarcado a ambos lados por un elemento torreado que tiene un piso más que el resto del edificio (seis en total) y que se cubre con una cubierta a dos vertientes de gran pendiente. Estas torres se desarrollan sólo a partir de la planta noble, y lo hacen a través de una tribuna abierta con columnas de capitel vegetal y tracerías, cuya base presenta también decoración escultórica vegetal. Encima de dicha tribuna hay un gran ventanal de inspiración gótica que se desarrolla a doble altura, englobando dos niveles en una misma apertura. En la planta baja se localizan tres arcadas de medio punto sobre columnas de capitel vegetal y fuste de escasa altura que hacen de este elemento uno de los más representativos del conjunto. Encima de esta arquería se desarrolla una tribuna de inspiración gótica con esbeltas columnas que contrastan con el escaso fuste de las de la planta baja. Esta tribuna con barandilla de tracería calada sirve como base al balcón corrido que se desarrolla en el segundo piso, en cuyo centro se dispone una ventana coronela. El resto de las aperturas se configuran como ventanas de dintel lisa enmarcadas por un guardapolvo. El último piso se organiza como una galería con arco de medio punto entre columnas y todo enmarcado por una moldura de similares características en los guardapolvos de las ventanas.

Las cerraduras murales que completan la fachada son mucho más sencillas que el central, aunque mantienen la misma tipología de ventana con dintel liso y guardapolvo que dan unidad al conjunto. El único elemento que rompe la monotonía de la fachada que da a la calle Valencia es la tribuna de la planta noble y que, a diferencia de las del cuerpo central, es de planta rectangular.

A través de la entrada porticada, localizada en la cerradura central de la fachada, se accede a un primer vestíbulo (donde originalmente se dejaban los carruajes), a continuación del cual se desarrollan cuatro escalones que vierten a un segundo vestíbulo al tiempo que en el tramo central de la escalera conecta con la escalera monumental que conduce al primer piso.

Esta escalera da acceso únicamente a la planta noble, mientras que al resto de niveles se accede a través de una escalera de vecinos localizada en un ángulo de vestíbulo y claramente diferenciada formal y estilísticamente de la principal. A diferencia de la de vecinos, la monumental se desarrolla en un espacio muy diáfano, cubierto con una claraboya de hierro y vidrieras policromas que se caracteriza por su disposición en ángulo, fruto de la configuración en chaflán de la finca. Destaca su barandilla esculpida y muy especialmente la galería porticada del piso principal, con arcos de medio punto que se apoyan sobre columnas de capitel floral y fuste muy esbelto. De gran interés es la puerta que da paso al interior de la planta noble, de madera y con una estructura muy peculiar (cóncava) para adaptarse al muro de líneas curvas.

Interiormente, los espacios de la planta noble y primer piso se encuentran hoy en día adaptados a usos docentes, dado su uso como Escuela Superior de Relaciones Públicas y Marketing (FORMATIC BARNA) y de la Escuela de Comunicación, Turismo y Empresa. Los antiguos salones de la planta noble actualmente se encuentran habilitados como aulas, aunque todavía conservan algunos elementos originales, especialmente los techos, carpinterías y algunos pavimentos. Destacan los techos de yeso moldurados de los espacios que dan al Passeig de Gràcia y el del pasillo, con vigas de madera, especialmente por su estructura que se adapta al muro curvo donde se encuentra la puerta de entrada a esta planta. La planta noble también tiene comunicación con la escalera de vecinos, desde donde se accede al primer piso, también ocupado por la Escuela. En este nivel, al igual que en el inferior, se conservan buena parte de los pavimentos “chica” originales, un tipo de pavimento policromo muy utilizado en la arquitectura barcelonesa durante la segunda mitad del siglo XIX y principios del XX. Destacan las carpinterías originales, especialmente la puerta de la entrada que conserva los elementos de bronce entre los que destaca la mirilla en parrilla y algunos techos de yeso moldurados con dorados muy puntuales, entre ellos uno con casetones que se abre a uno de los patios interiores de la casa.

El edificio conocido como Casa de la Viuda Marfà fue proyectado por el arquitecto Manuel Comas i Thos en 1901 y fue terminado en 1905.

Actualmente es la sede de la Escuela Superior de Relaciones Públicas y Marketing FORMATIC BARNA y de la Escuela de Comunicación, Turismo y Empresa.