El Hospital de Sant Joan Despí Doctor Moisès Broggi es un hospital de nueva construcción destinado a dar servicio a una población de 300.000 habitantes de la comarca del Baix Llobregat, en España.
La organización y disposición del Hospital dentro de la parcela viene determinada por los accesos a la misma, las orientaciones y condiciones topográficas del terreno.
La adaptación al sitio, y a sus condicionantes de acceso y entorno, explican la solución adoptada. Efectivamente, el terreno cuenta con un largo límite orientado al norte donde se localiza la avenida del Baix Llobregat. El acceso principal se ubica por el extremo suroeste de la parcela, en la cota más alta, desde donde también se puede acceder a la zona ambulatoria. Sin embargo, el acceso principal a las consultas es independiente y se ubica en la fachada norte, en la avenida del Baix Llobregat, desde la que se puede acceder más fácilmente en transporte público.
También con la idea de diferenciar los accesos según su funcionalidad, el acceso de urgencias se sitúa en el extremo noroeste de la parcela. Este acceso está en la cota más baja, una planta por debajo del acceso principal. Por último, el acceso al muelle de carga y descarga se encuentra en la parte este.
Arquitectónicamente se ha optado por un edificio compacto tratando de solucionar técnica y funcionalmente los siguientes conceptos:
1. Especialización de las circulaciones
Las circulaciones sanitarias y de público diferenciadas están estudiadas para evitar interferencias entre una y otra. De ahí la solución de colocar todas las zonas asistenciales en el sótano -1, para evitar la aparición de camas en la planta de acceso. La propuesta de un acceso independiente a las consultas externas y al resto de servicios ambulatorios posibilita el acceso de visitas externas o encamados desde dos accesos diferenciados.
La claridad compositiva de los recorridos y la continua relación entre exterior e interior del edificio facilita al usuario una buena orientación en el hospital.
2. Unidades de hospitalización
Se han orientado todas las habitaciones de las unidades de hospitalización en el sur y en el nuevo parque, con vistas a una zona tranquila y arbolada, protegiendo estas fachadas a través de un brise-soleil de mesas de madera de cedro rojo de Canadá.
Se ha conseguido que ninguna unidad de hospitalización quede aislada respecto de las demás para posibilitar la interrelación de personal sanitario: de ahí la solución de cuatro unidades en la primera planta, tres en la segunda y tres en la tercera.
3. Área de consultas externas
Se diferencia respecto al área hospitalaria propiamente dicha para mejorar su funcionalidad. Se han construido crujías más profundas para adaptarse al funcionamiento horario diferenciado y se ha potenciado la luz natural a través de la iluminación cenital, sin necesidad de hacer patios, consiguiendo así un edificio compacto y reduciendo los costes de funcionamiento.
4. Volumen edificado
Se ha buscado un equilibrio entre la pretensión de conseguir un edificio extenso y la voluntad de preservar un espacio importante como zona ajardinada, minimizando al mismo tiempo los recorridos internos para hacer más racional el funcionamiento del hospital. Esta compactación del edificio y el hecho de ubicar mucha edificación bajo rasante se ha acompañado con la ubicación de una serie de patios que permiten iluminar la mayor parte de los espacios del edificio, buscando una huella urbana discreta a pesar del gran volumen edificado.
5. Sostenibilidad
El edificio normaliza el concepto de Sostenibilidad puesto que se incorpora desde el diseño inicial, buscando crear un edificio capaz de un gran ahorro energético. Esto se logra tanto por el diseño arquitectónico (edificio cerrado al norte y abierto al sur, controles del sol exterior mediante los brise-soleil, y diseño de las fachadas) como por la instalación de mecanismos técnicos como son las placas fotovoltaicas y los sistemas de reaprovechamiento de aguas pluviales.