El Consejo Plenario del ayuntamiento de Barcelona del día 27 de enero de 2006, declara la voluntad de "iniciar las acciones dirigidas a la recuperación de la memoria histórica del monumento de las "Cuatro Columnas" de Puig i Cadafalch en la ciudad de Barcelona, ya sea en Montjuïc, o en un emplazamiento que garantice su valor simbólico", de acuerdo con la proposición no de ley aprobada por el Parlament de Catalunya el 22 de abril de 2005.
El presente proyecto responde a la última fase de la ejecución de este mandato, recogiendo el proyecto ejecutivo de la reconstrucción de las 4 columnas de Montjuïc y la urbanización del espacio público de su entorno.
Esta construcción se sitúa en la plaza Marqués de la Foronda, sobre su eje, y muy cercana a las cascadas pertenecientes al eje de agua rematado por la Font Màgica. La superficie sobre la que se prevé intervenir es de 844,82 m2.
Una vez elegido el emplazamiento definitivo para las columnas, aparecen tres temas definitivos:
- El sitio preciso donde ubicarlas. Dos son los condicionantes que en ese sentido podían determinarlo.
. La presencia de la balaustrada y las galerías de servicio de las fuentes que siguen ésta por el lado de la cascada. Afectar a la galería suponía una repercusión económica y técnica que había que evitar, por otra parte, aunque la voluntad inicial era aproximar al máximo la columna al desnivel de la cascada (tal y como originalmente se situaron para ser vistas con la máxima integridad desde todos los puntos de vista) el hecho de intervertir derribando y afectando a las copas que la rematan lo desaconsejaron.
. La futura presencia de la estación de la Feria de la L2 de metro. Se trata de un proyecto redactado, pero sin fecha prevista para el inicio de las obras. Los muros pantalla que el proyecto de la estación prevé, eran inicialmente el límite que no debía invadirse. Finalmente, desestimada la afectación sobre las balaustradas y elementos ornamentales de la cascada, ha sido necesario retirar la posición de las columnas hasta las pantallas de la estación afectando a los pliegos que éstas prevén.
- La definición geométrica de la columna. El punto de partida ha sido la determinación de la altura de la columna. En este sentido se ha tomado como referencia el nivel del balaustre de remate de la azotea del Palau más alto. Definida la altura, la formalización de la columna se ha hecho de acuerdo con los cánones clásicos definidos por Vignola a partir del módulo de la columna - un módulo equivale a 1/12 parte de la altura de la columna - el intercolumnio se ha ajustado según la misma proporción que en su día plantea Puig i Cadafalch, ligeramente más estrecho que el canon clásico, pero más favorable a las proporciones del símbolo a representar. Las columnas son de piedra artificial, levantadas en sucesivos tambores costaleros y postesados. La cimentación es resuelta con micropilotes. La cubierta de la columna, de 5,2 m2 cada una, prevé recoger las aguas de lluvia y canalizarlas interiormente hasta un desagüe para evitar escorrentías incontroladas.
- Su llegada al suelo. Se concibe como un espacio abierto, accesible y no segregado del resto de la plaza. La transición entre el asfalto y la piedra artificial de la columna se realiza a través de un pavimento y de una geometría trabajada. Con la necesidad de apartar las escorrentías pluviales de los pies de las columnas se plantea un pavimento curvado que abarca un rectángulo limitado por las escaleras y por las trazas propuestas para la ordenación de la plaza. La curvatura toma el punto más alto debajo del eje de las columnas. Lateralmente aparece un escalón decreciente que al llegar a la balaustrada y al lado opuesto haciéndose de altura cero; en estos puntos se plantean unos interceptores lineales de poca apariencia. El material que resuelve este pavimento es la piedra arenisca roja tipo Figaró de formato 40x40x7 con un acabado apomazado, que a modo de retícula acoge la llegada de las columnas. Es en este pavimento donde se prevé ubicar la placa conmemorativa, que se prevé de piedra natural, arenosa tipo Montjuïc, rebajada según texto y tipografía definidos y acabado con chapa de latón dejada a plano de la piedra. Para evitar que vehículos y camiones vinculados a la Fira estropeen y ensucien con roderas este basamento se han planteado unos fitones del mismo tamaño y material que los del pavimento.